PELEAS DE DIPUTADOS, ...

En estos días hemos visto repetidas imágenes de diputados de Corea del Sur, en plena pelea. Hombres y mujeres de la Cámara, unos contra otros, que nos han trasladado a otros escenarios, a reyertas de jóvenes en la calle.

El motivo, la aprobación de un paquete de medidas para reformar el sector financiero y
de la prensa.

Mientras el sector más de izquierda denuncia que esos cambios suponen un mayor
control del sector financiero por parte de las empresas, los conservadores que lideran
el poder pretenden retirar ciertos controles de la propiedad de medios. Postura
defendida también por los grandes grupos económicos coreanos.

Las fotos publicadas en diferentes medios reflejan cómo la clase política coreana, en esta ocasión, no guarda la compostura, ni el saber estar. Se cumple aquello de "una imagen vale más
que mil palabras".Si lo analizamos, podemos observar que las diputadas se pelan, se pegan, caen al suelo y se tiran de los pelos, ¡que horror!, en la sala del Parlamento y delante de las
cámaras.

Ellos, los diputados se persiguen entre las bancadas de la Sala, se lanzan objetos e
incluso, llegan a romper elementos del mobiliario.

Dónde estan los políticos tecnócratas e intelectuales que se supone gobiernan el país.

Ahora ha sido en Corea del Sur, en marzo ocurría algo similar en Uruguay donde el propio
presidente de la Cámara declaró "no ha sido el mejor ejemplo el que se le transmitió a
la sociedad uruguaya”, avergonzado por los momentos de violencia que protagonizaron
varios diputados; y en Italia, hemos podido ver en más de una ocasión cómo
diputados del Parlamento han llegado a las manos, tras una larga lista de insultos.

Será que las peleas y trifulcas parlamentarias están siendo más frecuentes que en
etapas precedentes.

Será que los discursos políticos están dando paso a la violencia sin medida.

O será que los buenos políticos, son cada vez menos.

En definitiva, velemos para que las palabras cierren el paso a los gallos de pelea.